HOMENAJE A "EL QUIJOTE"

jueves, 25 de diciembre de 2008

EL QUIJOTE y las Fiestas que ahora tocan.

Cada cual que celebre estas fechas como su corazón le dicte, yo lo haré con los mios, cuando este post salga a la luz, lo hará por las excelencias de Google... yo estaré en Tucci; descansando, al menos lo intentaré... intentaré desconectar lo cual veo difícil...

Unas Felices Fiestas con los vuestros os deseo, como marca la tradición son fechas de compartir con los demás, por si a lo largo del año no nos acordamos.

Aquí una felicitación Quijotesca que encontré en la red...no iba a ser menos...hoy tocaba Quijote.


Ahora a lo yo venía... el capitulo XXXIII, lo resumiría éste y los siguientes en una sola sentencia "no tentarás a la suerte"... hay quién dice que no hace tal situación porque no la ha probado... aprovechando que nuestros personajes están en la Venta y entretenidos por la lectura del "curioso impertinente", quisiera imaginar que entre col y col almorzarían, o cenarían... no se.. pero es que además queramos o no, vamos a tener que relacionar las comilonas con las fechas...

Quisiera aprovechar el juego que me da la obra que nos trae por aqui los jueves e indagar sobre la gastronomía que en la época seguramente se degustaría en las Ventas...y en cualquier hogar:

Los españoles nos caracterizábamos por la mesura en el comer y beber en el día a día, pero que chocaba directamente con la abundancia y excesos de los banquetes y celebraciones ( algo habrá quedado o ¿no?) . Nuestra base era la carne, pero fuertemente influenciados por la tradición Cristiana respetábamos la vigilia (ayuno y abstinencia) y entonces la sustituíamos por huevos y pescado - seco o en escabeche, solo los ricos podian degustar el fresco -.

De todas formas el plato nacional o típico de la época era la OLLA (podrida?), con muchas variantes, parece ser que dependía de la época del año y fundamentalmente de la cartera del cabeza de familia.

Por lo general la Olla constaba de zarandajas (como dirían mis hijos) o sea cebollas, ajos, nabos, repollo; legumbres, carne (generalmente tocino) el comerlo daba cierto prestigio pues en ello se demostraba ser cristiano viejo, ya que los musulmanes no lo hacían. Se valoraba mucho los despojos o casquería (higaditos, pulmones...); el manjar blanco una especie de crema espesa con gallina, arroz, almendras y azúcar; el gigote preparado de carne picada....

... continuará...

post programado... siento no poder visitar con la asiduidad... pero mi padre no tiene internet... todo sea por la locura cervantina

viernes, 19 de diciembre de 2008

EL QUIJOTE y las novelas de caballerias

"en un lugar no de la Mancha.... pensativo el que subscribe"

Y en el capítulo XXXII.... el mismo Cervantes por boca de sus personajes, en esta ocasión en personas de no muy alta alcurnia y encima mujeres (no hay nada de peyorativo en mi frase) , discusión de novelas de caballerías sobre las buenas, las malas, las que deben de destruirse y las que conservase... en definitiva parece un homenaje a la lectura en tanto se defiende como pasatiempo del momento...Nuevos novelas, personajes de ficción y de historia son nombrados dentro del debate de libros adecuados o no:

- Don Cirongilio de Tracia.
- Felixmarte de Hicarnia.
- García de Paredes.
- Gonzalo de Córdoba, El Gran Capitán.

De cualquiera de ellos se podría escribir muchas páginas....yo en esta ocasión dejo esos enlaces para los curiosos, y me dedico a despejar el tema de la novela caballeresca, de manera muy sucinta...
Decir que las novelas de caballerías relatan las andanzas y vida de los más variopintos caballeros sería algo obvio. Su origen lo podemos encontrar en las historias del denominado Ciclo Artúrico, obras que narraban la vida del Rey Arturo y de los caballeros de la Tabla Redonda. Por lo poco que se y he podido comprobar, en España como no sería de otra forma, estas novelas tienen su origen en este ciclo y en el ciclo Carolingio - en las que se relatan las gestas de Carlomagno y los Doce pares. Quedaría el Ciclo greco - asiático lleno de Palmerines y Amadises, que son por lo visto nuestros libros de caballerías de tinete peninsular

En unos apuntes encontré este pequeño cuadro, que transcribo literalmente en el que se comparan las novelas de caballerías clásicas con El Quijote...

Este post es el último en directo de este año...no podré ni visitar con la asiduidad que quisiera...y menos publicar... os veré desde el movil....

EL QUIJOTE y las novelas de caballerias

"en un lugar no de la Mancha.... pensativo el que subscribe"

Y en el capítulo XXXII.... el mismo Cervantes por boca de sus personajes, en esta ocasión en personas de no muy alta alcurnia y encima mujeres (no hay nada de peyorativo en mi frase) , discusión de novelas de caballerías sobre las buenas, las malas, las que deben de destruirse y las que conservase... en definitiva parece un homenaje a la lectura en tanto se defiende como pasatiempo del momento...Nuevos novelas, personajes de ficción y de historia son nombrados dentro del debate de libros adecuados o no:

- Don Cirongilio de Tracia.
- Felixmarte de Hicarnia.
- García de Paredes.
- Gonzalo de Córdoba, El Gran Capitán.

De cualquiera de ellos se podría escribir muchas páginas....yo en esta ocasión dejo esos enlaces para los curiosos, y me dedico a despejar el tema de la novela caballeresca, de manera muy sucinta...
Decir que las novelas de caballerías relatan las andanzas y vida de los más variopintos caballeros sería algo obvio. Su origen lo podemos encontrar en las historias del denominado Ciclo Artúrico, obras que narraban la vida del Rey Arturo y de los caballeros de la Tabla Redonda. Por lo poco que se y he podido comprobar, en España como no sería de otra forma, estas novelas tienen su origen en este ciclo y en el ciclo Carolingio - en las que se relatan las gestas de Carlomagno y los Doce pares. Quedaría el Ciclo greco - asiático lleno de Palmerines y Amadises, que son por lo visto nuestros libros de caballerías de tinete peninsular

En unos apuntes encontré este pequeño cuadro, que transcribo literalmente en el que se comparan las novelas de caballerías clásicas con El Quijote...

Este post es el último en directo de este año...no podré ni visitar con la asiduidad que quisiera...y menos publicar... os veré desde el movil....

viernes, 12 de diciembre de 2008

EL QUIJOTE y las ventas.


Recreación de una venta de la época - fruto de mi Dulcinea

Grupo de lectura del Quijote


En el capítulo XXXI.... como está el patio!!! El encuentro no puede ser menos afortunado, una puesta en entredicho... o choque de visiones particulares: la dulzura, la belleza, la femineidad con que nuestro Quijote imagina a su amada y la visión real que Sancho tiene, fruto de la mentira. provocada Un poco de lucidez al caer nuestro protagonista en lo raudo y veloz que Sancho ha sido en la ida y venida de dar los encargos...y una vuelta atrás en la historia con la aparición de Andrés "el apaleado"....

Me llama ahora, y me llamaron siempre la atención las ventas... no sé por otras zonas de la península, pero por Sanlúcar las hay... y bastantes. Entendidas hoy como lugares de concurrencia, de tertulia gastronómica y de rancho casero y barato... aunque he de reconocer que aunque siguen siendo como cuento... lo de barato se ha perdido... ¡ todo tiene su precio !.

Hoy me decanto por escribir sobre La Venta como lugar de encuentro, como espacio dramático, como escenario en el que Miguel de Cervantes presenta personajes, hace que se conozcan, e intercala episodios y aventuras.

Cuando de estudiante escuchaba hablar de las ventas, me imaginaba todo un escenario teatral donde se intercalaban pequeños retazos de obras... y la verdad es que no lo puedo explicar.
En la época que tratamos las ventas estaban situadas en caminos importantes para dar alojamiento a viajantes, comerciantes y arrieros. Solían tener dos plantas abiertas sobre un gran patio o corral, en el que estaban las zonas de pesebres, pozo y abrevadero. En la planta baja se situaban la cocina y los comedores y en algunas en la parte de arriba solía haber una zona de dormitorio.

Por lo que se sabe que no es poco, y como dato anecdótico, constituyeron los primeros "hoteles" de carretera y podían dar servicios de alojamiento, cuadra, comida y postas (mensajería- correo)... Es curioso Felipe II tuviese que autorizar a los venteros - posaderos para que pudiesen vender comida y bebida a los viajeros que por allí pasaban.


Como recuerdo de la época, aún quedan en pie algunas como:


- Venta de don Quijote - Puerto lápice

Es cortito...como el tiempo que tengo en estas fechas

jueves, 4 de diciembre de 2008

EL QUIJOTE y los principios de la caballería


Diaporama 2: Reencuentro de Sancho con Don Quijote - by Jesús

Grupo de lectura de El Quijote

La contradicción en el juego de este capítulo es digno de señalar... Dorotea conocedora de novelas de caballerías y sin embargo se equivoca desmedidamente al confundir Osuna con puerto de mar...de todas formas me imagino que es un choque de situaciones que el autor pone en boca de sus personajes para hacer más divertido el pasaje.

Me llama mucho la atención que a pesar de la locura de Don Quijote, no se le va de la cabeza su amada Dulcinea, ni siquiera ante lo goloso que pudiera ser tener a la vuelta de la esquina la "posesión" de la mano de un princesa... y es que el honor y la fidelidad en el caballero es primordial.

Mi contribución la voy a enfocar desde el punto de vista de los PRINCIPIOS DE LA CABALLERÍA:

El honor. El caballero debía salvaguardar su honor por medio de la fidelidad a la palabra dada, la generosidad y protección hacía los necesitados, la obediencia y defensa de la Iglesia.

La guerra. Los caballeros formaron parte de alguna de las órdenes militares que se fundaron para defender lo Lugares Santos, por lo que estaban obligados a acudir contra los enemigos de la religión.

El adiestramiento. No solo se formaban en el uso de las armas privadamente, sino que tomaban parte en las justas o celebraciones festivas que se organizaban en las ciudades, y en las que se enfrentaban con caballeros de distintas procedencias, por el simple hecho de ganar prestigio y fama.

El amor. Todo aquel que se precie caballero había de tener una dama a quién servir. A ella se encomendaba antes de entrar en batalla - como si de un santo o santa se tratase - y a ella iban dedicados todos sus posibles éxitos.

Estos cuatros bastiones va a tener muy en cuenta nuestro protagonista en toda la obra.

(no se que oscuro manejo de blogguer me hizo que se me reconociera este post con un día de antelación ¿tendrá Beltenebros algo que ver??)